Las bodas de reinas y reyes son un fenómeno de alto alcance. Ante los representantes de las monarquías europeas y el público local se despliegan espectáculos fastuosos. Para la exaltación de la monarquía colaboran los mejores artistas de la corte, modistas, arquitectos, músicos, teatreros, autores, etc.
En 1690, Carlos II de España se casa en segundas nupcias con Mariana de Neoburgo. Con la hacienda pública en una situación desastrosa, no hubo festejos salvo en Madrid, entre ellos una entrada pública en carruaje a la villa por calles adornadas y varias obras de teatro. Se prepararon para la ocasión varias comedias conocidas, La púrpura de la rosa, Fieras afemina amor, una zarzuela de Antonio de Zamora y un único estreno, la fiesta No hay con Amor competencias.
Se trata de una comedia de tema mitológico que acumula varios mitos procedentes de las Metamorfosis de Ovidio. La acción principal se organiza sobre el enfrentamiento de Venus y Cupido con Diana y Apolo.
El códice fue descubierto por la editora María Teresa Cacho Palomar en la Biblioteca Estense Universitaria de Módena, una de las pocas bibliotecas áulicas que se conservan. La fiesta incluye una loa, una comedia de música, un entremés, un baile y un fin de fiesta. Las piezas breves fueron escritas por José Pérez de Montoro.
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